18.12.04

Maná

Entonces se me quitaron las ganas de ir. Hasta la fecha no había encontrado con quién, hasta que en aquella mesa, Amelia dijo que iría a verlos, con un grupo grande de gente...

-¿con quién vas a ir?- pregunté inocente, albergando la esperanza de que fuera el tipo de gente ideal para formar yo también parte de ellos...

Amelia cambió la expresión de la cara. No hacía falta ni una sola palabra más... ya sabía quién, entre todo ese grupo de gente, iba también al concierto. Justo la última persona del mundo que quería cruzarme.

Y no fui.

Maná actuó en Sevilla en aquel verano del 2000. Fue en el estadio Olímpico y calculo que irían 30.000 personas, no sé... una locura.

También es cierto que en el año 2000, Maná era un grupo que me gustaba, pero no era EL GRUPO... quizá el destino no quiso que ese macro-concierto fuera el recuerdo de Maná que yo había de tener.

Y pasó el tiempo, y me fuí a estudiar a Copenhague. Y pasaron los meses y en Emdrup, en la yellow kitchen, en el party room, downstairs, una música, un tiempo de tu vida... Emdrup sonaba a Manu Chao y a Clandestino, sonaba a U2 y a With or Without U, sonaba a Buena Vista Social Club Band... y sonaba, sobre todo, a Maná.

Quizás la locura que Peter sentía sobre la banda mexicana lo exageraba todo, no sé, quizá la magia de aquellos meses hace que todas esas músicas, como las fotos de aquel spring semester, se te hagan más tuyas todavía...

Y siguió pasando el tiempo... y en la vuelta, en Sevilla, nuevos CDs, pero obligatoriamente, Clandestino, Buena Vista Social Club Band, Omara Portuondo... y rescatado de esos que no sueles escuchar, Unplugged de Maná...

"Revolución de Amor" llegó en el verano de 2002. La llegada del nuevo trabajo parecía que era una nueva señal... fué la banda sonora de aquella visita a Sarah en agosto, de aquella semana escasa en Copenhague siendo un turista, de aquella semana en la que me día cuenta de que estaba enamorado. "No sé que voy a hacer sin tu cariño", recuerdas, skat?

Unplugged y Revolución de Amor sonaban en la vuelta Dinamarca, en ese viaje por Europa del que se cumplen dos años, ese para vivir la vida de verdad, no la de un Erasmus latino en Escandinavia...

Habían pasado ya más de 5 meses en aquella vida danesa de nuestra casa de Valby, de fregaplatos en La Lanterna, del coche que se queda sin bateria por no usarlo, de meter la mitad de mi sueldo diario en un bote para pagar el alquiler... entonces, Peter nos dió la noticia:

Maná daría un concierto en Hamburgo, dentro de su gira "Revolución de Amor". Hamburgo!, a sólo unas horas en coche!, algo más de 300 kilómetros!

Teníamos que ir, por supuesto... no podíamos perdernos esa oportunidad... y lo hicimos.

Peter se encargó de comprar las entradas por internet. Compró cuatro: las dos de Sarah y mía y otras dos para él y para alguna chica de la cual estaba enamoradísimo perdido... un mal rollo porque la historia tenía mala pinta, ella tenía un novio, o acababa de salir de una relación... no recuerdo bien. El caso es que decidió que no iba y la entrada se quedó colgando.

Guillaume fue el cuarto. Era su cumpleaños y Peter le regaló la entrada... lo que no sabía él ni Guillaume ni nadie es que no sólo regalaba una entrada, estaba regalando una experiencia única.

3 de junio de 2003. Temprano llegaron Peter y Guillaume a nuestra casa, el día era radiante y salimos con todas las ganas carretera para alante. Destino, la frontera alemana, el ferry.

En el coche sólo sonaba Maná, la conversación fluida, paradas para picar algo... la espera para montarnos en el barco.

Aquellos bocatas de tortilla, aquel verano del Norte de Europa. Era un viaje que estaba lleno de libertad, de aventura en cierto modo... para mí era una liberación. Atrás se quedaban las fatigas de la rutina de Copenhague, la ausencia de pequeños placeres, el ajustado presupuesto, la grasa en el pelo cuando salía de trabajar mientras en la parte más alta del ferry Alemania llegaba poco a poco.

Frontera, entrada en un nuevo país... diferentes carteles en la autopista, devorando los kilómetros para llegar a Hamburgo. Llegada.

Pasamos toda la tarde en la ciudad. Una gran ciudad de esa Alemania que yo conozco. La Alemania viva de gente en la calle, de grandes edificios, de tráfico, de puntero de Europa... seguro que hay otra Alemania, pero esa es una desconocida para mí.

Recuerdo que hizo muchísimo calor. Un calor HUMEDO con mayúsculas... sudábamos sin parar, pero aquel día los reyes éramos nosostros cuatro... aquellas cervezas frente al lago, los helados del centro antes de coger el bus que nos llevaría a St. Pauli... Grosse Freiheit 36, Maná.

St. Pauli era el barrio donde estaba el local del concierto... a mi me sonaba porque en Hamburgo hay dos equipos de fútbol, el Hamburgo y el St. Pauli, ese que va de marrón... lo que no nos imaginábamos es que el mencionado barrio es como el barrio rojo de Amsterdam. Lleno de puticlubs, de bingos, de salas de masaje thailandesas... de sex-shops. Uff!, toda una experiencia la visita por sí sola.

Caminando, con el mapa presente, llegamos, Grosse Freiheit 36!, Un local ni muy grande ni muy pequeño... allí estábamos. Faltaba poco para el concierto.

Aquella cerveza en aquel siniestro bar dónde los lugareños nos miraban con algo de desdén sólo fue una excusa para hacer tiempo... cuándo salimos, la cola para entrar ya había empezado. Gente que con carteles pedía entradas, en alemán, inglés y español. Alemanes, latinos... escuchabas tu idioma en St. Pauli, escuchabas el acento de México, Colombia, España...

La espera se hizo larga. Al fin, entramos... un calor insoportable en aquel local, era el día que hacía mezclado con los metros cuadrados del lugar y la gente...

Pero aquel local me pareció el más especial del mundo. Era perfecto... cuánta gente habría allí?, 500, 600?, no lo sé. pero no era ese Estadio Olímpico de 30.000 personas mirando entre saltos unas minifiguritas que debían ser la banda.

El local era un sueño para ver a una banda que es capaz de reunir a todo México DF en masa. Éramos unos escogidos, el escenario estaba a menos de 6 metros... todos nos agolpábamos más y más... banderas de México, Ecuador, España, Argentina, Colombia... un microcosmos latino en Alemania.

Se hizo interminable esperar... parecía que no querían salir nunca.

Pero la luz bajó y el bajo de Juan empezó a sonar... entre sombras salió Sergio y empezó a tocar los primeros acordes de "Justicia, Tierra y Libertad"... el concierto empezaba y Grosse Freiheit enloquecía.

Jamás olvidaré ese concierto, sin duda el mejor de mi vida. Canté, bailé, sudé, vibré, soñé y disfruté como nunca jamás... A mi lado estaba mi novia a la que podía abrazar y besar y sólo con volver el cuello, veía como Peter disfrutaba igual que yo. Y eso me hacía feliz.

No olvidaré a Fher como levantó su dedo "fuck u" al decir la palabra policía cuándo entonaba que a "Chico Méndez lo mataron, era un defensor y un ángel de toda la Amazonia. El murió a sangre fría, lo sabía Collor de Melo y también la...". No olvidaré a Alex, el bateria, con el que FLI-PÉ, como llenaba el concierto de energia, como tocaba, como lo vivía, como era...
Flashes en la memoria. La imagen enigmática de Sergio, el guitarra, los coros, Juan al bajo y sobre todo Fher y Alexl... este último subido en la batería cantando un tema del último CD.

Lamento mucho que Guillaume, francés, no vibrara tanto como nosotros tres... no entendía las letras, no es TAN latino. Pero para mí, aquel concierto fue especial. Como digo, una experiencia en la vida, esos días que no olvidarás por muchos años que pasen y experiencias que vivas

Pasó el concierto, pasó el Mc Donald´s de St. Pauli de mi cena, pasó el viaje de vuelta, el quedarme dormido en el ferry, el llegar a Copenhague a las 5 de la mañana, de día totalmente... pasó el tiempo, pasó Dinamarca, pasó el 2003 y casi ya el 2004.

Ayer jueves me compré el DVD de Maná "Acceso Total". Es el DVD de su gira, esa de la que formamos parte... me sentí morir cuándo en una de las imagenes vi la cola en Grosse Freiheit, y aunque no salíamos, sé que estábamos allí... ayer y hoy, he gastado el DVD, he vibrado, cantado y soñado de nuevo con Maná, con aquel concierto y con aquel día.

Y no podía más que contarlo aquí.

3 comentarios:

Blogger El Vikingo Holandes dijo...

Heheheh... what else is there to add than Guillaume's words when it was over: "Why do they stop now, I was really getting into it!!!" Even though he might not know the lyrics... and yes, a broken heart lead to a fantastic trip with some great people. It was very probably much better like this...
God, we were deeeeead when we came home!

Oh, and I hate you for having the DVD already... I ordered it 3 weeks ago on the net, and still nothing... See you in 8 days!!!!!

10:58 a. m.  
Blogger El Vikingo Holandes dijo...

y... otra cosa... no se lllama 'Ángel', se llama Alex...

lo siento :)

3:42 p. m.  
Blogger danirmartin dijo...

You were right... I just fixed it.

Blame on listening too much "Ángel de Amor"...

2:14 a. m.  

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